Soñando Despierta

Que empieza con rápidos destellos de incomprensión, miradas que son peor que un implacable juicio popular . Énfasis en aparentar lo que no es ,,, Necesidad de ser algo, que no concuerda con la realidad. Ganas de agradar, ínfulas de pertenecer a algo, de ser miembro de un rebaño al que yo llamo Sociedad.

Una enfermedad, que a lo largo de los años , irá contaminando a las personas. Que irá minando sus almas , hasta el punto de que no exista luz interior en ellas. Todos seremos muñecos de trapo cortados por el mismo patrón. Clones de lo que otros querían que fuéramos, y ellos no llegaron a ser …

Quita esos kilos que te sobran , ponte unos tacones de infarto. Maquíllate hasta que nadie pueda ver quien anda detrás,vístete para matar. Da igual que seas una más, que no tengas encanto personal, lo importante es no desentonar. En el fondo es lo que siempre has querido, que te miraran al pasar, encontrar a un “príncipe” que te hiciera vivir en un cuento de Hadas. Un hombre con valores y cultura, uno que se preocupara por los demás más que por él mismo. Que te quisiera tal y como eres, tener una bonita casa y un perrito adorable.

Despierta cariño …Solamente fue una pesadilla.

La vida es un cuento desencantado, en el que pocos tienen mucho , y la mayoría tienen lo justo. Donde el materialismo gana terreno a la intención, y en el cual un detalle, no lo valora cualquiera. Un infierno donde el peor abismo es nuestro propio ombligo, y el peor castigo nuestra propia ambición. Que nos envuelve en las llamas del egoísmo, y nos destruye día a día sin darnos cuenta.

Ahí me doy cuenta lo increíblemente afortunada que soy, por verlo todo desde la amplitud de otro ventanal. Por haber crecido con la conciencia de dar sin recibir , y por tener a mi lado, gente que tiene esperanzas en el futuro. Un futuro que no sabemos que nos traerá, pero esperemos que el cambio nos haga felices a todos …

Érase una vez una princesa sin castillo, y una reina sin trono … En el que el feliz, no come perdiz, y el que ama lo hace para siempre , pero con los ojos bien abiertos.

Bienvenidos al mundo real